ENTREVISTA A BORDO DE LA EMBAJADORA DE LOS MARES

Por Fernando Ahumada

Luego de haber realizado la navegación hacia Puerto Belgrano, para el adiestramiento de los cadetes navales de la Escuela Naval Militar y aspirantes navales de la Escuela de Suboficiales de la Armada, la Fragata A.R.A Libertad descansa en su apostadero habitual, en el muelle oeste de la dársena norte del puerto de Buenos Aires.

Amarrada sobre su banda de estribor, el buque insignia de la Armada Argentina se prepara para el 2014, año en que se realizará el encuentro de grandes veleros “VELAS SUDAMERICA 2014”, organizado por Argentina a través de la Armada, donde participaran buques veleros de los países latinoamericanos e invitados de otros países. El último fue “VELAS SUDAMERICA 2010”, cuando las armadas de Argentina y Chile organizaron el nombrado encuentro. Este es un tradicional acontecimiento que se viene dando hace años y el cual en ediciones anteriores participaron veleros de todo el mundo.

Sobre su cubierta de madera se respira el aire de los hombres de mar, que con esfuerzo y abnegación, llevan a cabo cada maniobra en cada navegación. Las lanchas y el bote neumático sobre sus calzos, las balsas salvavidas sobre los obenques, toda la jarcia de maniobra arranchada sobres las mesas de propao y la vista a todos los artefactos náuticos dan ganas de salir a navegar y disfrutar de lo que aquellos marinos hacen en altamar.

Abordo, PeR fue recibido por el Teniente de Fragata Matías González, quien se desempeña como Jefe de las divisiones 3° y 4° del Departamento Cubierta. El mismo afirma que el buque se encuentra en óptimas condiciones de funcionamiento y que su gente demostró un verdadero profesionalismo durante la travesía en el mar. Esto respondía a cada pregunta de PeR:

- En la última navegación que tuvieron hacia Puerto Belgrano: ¿Cómo respondió el buque, la gente con respecto al adiestramiento en cada maniobra?

- El buque respondió muy bien, la fragata es un buque muy marinero. Nos tocaron días lindos y días no tan lindos, con el mar muy agitado, mucho viento, pero la fragata se comportó muy bien. Se pudo hacer maniobras con vela, lo cual me permitió ver el adiestramiento sobre todo en la gente de MAR. La verdad que el rendimiento fue excelente.

-¿Qué siente usted hoy al ser uno de los jefes de cubierta del buque insignia de la Armada a nivel mundial?

- Para mí es un orgullo y la verdad que es un placer. Este es un buque para disfrutar, da para disfrutar mucho, sobre todo la gente de cubierta que es la que maneja las maniobras con los palos y toda la arboladura. Este es un buque por excelencia, es de la gente de mar. El sudor que corre, es de la gente de mar. La sangre que se pone para los trabajos con las velas, es de la gente de mar. Así que es el mejor lugar donde podría estar.

-¿Cómo ve la actitud en general de la dotación, teniendo en cuenta de que este año no se realizará el viaje habitual de todos los años? ¿Ve decaída la moral de la dotación, o ve que siguen trabajando con el mismo entusiasmo de siempre?

-La moral y el espíritu, es algo que siempre se trata de mantener en alto. Indudablemente algunas variaciones, noticias de último momento, algunas ansiedades van actuando de forma positiva o negativa, pero el personal es muy profesional y nunca se vio la moral baja. Para conseguir eso, uno se basa en la disciplina y la verdad que a bordo, todo el personal fue muy correcto y la moral siempre estuvo en alto.

-¿Cómo se preparan para el 2014, año del encuentro de grandes veleros?, ¿quiénes participarán?

- Participan varios países de Sudamérica: Uruguay, no en todo el recorrido, Chile, Perú, Brasil, Ecuador y México está por confirmarse. En si la mayoría de los países estarían participando, en mayor o menor medida. Nos preparamos con muchas ganas y al ser un año que no se haya hecho el viaje tradicional, genera más expectativas para el viaje del año que viene.

-¿Qué aporta culturalmente la fragata en cada travesía que emprende, teniendo en cuenta que visita diferentes puertos del país y del mundo?

- Realmente, lo dividiría en tres partes:

Primero, lo que aporta la misión de la fragata que es formar a los guardiamarinas profesionalmente, que conozcan bien el litoral marítimo de su país. Van a navegar, van a conocer sus costas, como es el mar, como se comporta, van a ver los peligros que puedan tener. Eso es lo primero y lo más importante que se van a llevar.

Segundo: culturalmente la visita a otros países suma mucho. La argentina y todos los países de Sudamérica buscan estrechar sus vínculos y sin dudas una de las mejores formas es a través de sus fuerzas armadas. Nosotros fortaleceremos nuestras relaciones con pares de las otras marinas. Hace rato que se viene siguiendo esta política, en la cual los Tenientes de Navío se relacionan con los Tenientes de Navío de otras fuerzas y así sucesivamente con las otras jerarquías. Estos alguna vez compartieron en algún ejercicio, un operativo o algún evento como el “VELAS”. Eso es lo que se busca ahora, con la nueva generación de guardiamarinas, integrarlos a los guardiamarinas de las otras armadas. ¿Por qué?, porque en el futuro el guardiamarina de hoy va a ser el futuro Almirante y al ir relacionándose y formándose durante toda su vida naval, no sólo va a tomar decisiones y contar con el apoyo de un país aliado, sino también con un amigo.

Tercero: la fragata promociona la Argentina, por ahí hay gente que no conoce nada de la Argentina y se acerca al barco, nos viene a visitar, le damos un recorrido por la nave. Le explicamos de dónde venimos, quienes somos y así nos conocen, conocen nuestra cultura, les contamos como es nuestro país. Llevamos publicidad de las provincias, les hacemos conocer los lugares turísticos a través de folletos. Las autoridades que vienen a las recepciones pueden conocer algunos de nuestros vinos y comidas. En definitiva, todo lo que se pueda difundir de nuestro país lo hacemos.

-¿Cómo es un día a bordo de la Fragata libertad?

- El día en puerto, comienza con la formación de armar trabajo a las 07:30. Como su nombre indica es donde se imparten las directivas de lo que se va a hacer en el día. Este buque tiene la particularidad de estar mucho a la vista, por lo que requiere de mucho mantenimiento: pulir, lijar y pintar.

La Armada da la posibilidad de trabajar y conocer al personal, entonces uno se dedica mucho, no solo a lijar y pintar o manejar personal, sino a conocer al hombre; conocer al cabo, al suboficial y así entre todos. Eso es quizás lo que crea un vínculo, que después es necesario porque en navegación uno necesita conocer a las personas con las que va a convivir, porque más que trabajar es convivir abordo. Entonces es: trabajar, conocer al personal que se tiene a cargo, eventualmente hacer una distención, jugar al futbol, hacer algo para relajar, limpieza, comer algo: Los cocineros de la Fragata, son los mejores de la Armada. Después retirada, cada uno a su casa y el personal que vive abordo, sale a pasear por la ciudad y por la noche regresa a dormir, hasta el otro día para volver a retomar sus actividades.

- Cuando se enteró que había sido designado para formar parte de la plana mayor de la  Fragata A.R.A. Libertad: ¿Qué sintió y cómo reaccionó su familia?

-A nivel familiar, hay un doble sentimiento: por un lado, para cualquiera que pertenece a la armada es un honor y un orgullo pertenecer a la dotación de la  Fragata Libertad, porque al margen de que el buque es muy lindo y muy especial uno sabe que es como jugar en la selección, es una señal de que uno viene trabajando bien. La familia eso lo reconoce, lo entiende y le gusta.

Por otro lado, está el trago amargo de que saben que uno no va a estar por mucho tiempo en la casa, entonces esa es la parte difícil. De todos modos, mi familia me apoya y la verdad que es muy importante. Para todos los marinos es importante de que la familia lo entienda y lo apoye.

Así concluyó la entrevista con el Teniente de Fragata Matías González, un joven, pero experimentado marino, que desde sus comienzos en la Escuela Naval Militar como cadete de 1° año, hasta hoy que es jefe de las divisiones de cubierta de la Fragata A.R.A Libertad, supo navegar por distintas latitudes, fue aprendiendo y desempeñándose como jefe de diferentes cargos. Es por ello, que es un fiel ejemplo para sus camaradas: tanto subalternos, como pares.