lunes, 9 de septiembre de 2019

Entrevista al director del Museo Municipal de Monte Hermoso, Profesor Juan Sorensen.


Por Silvia Majluf

-¿En qué año y quien tuvo la iniciativa de formar el museo histórico de Monte Hermoso?
-Para hablar del museo tenemos bastante hacia atrás, allá por la década del 80 alguien comentó que posiblemente, una de las viejas casitas de madera y chapa que están sobre calle Dufaur fuera donada para que se estableciera un Museo Histórico, algo que refiriera a la historia de Monte Hermoso. Eso quedó en nada, pasaron los años y llegando al año 1995 el que por entonces era director del Museo de Ciencias Vicente Di Martino, tuvo la idea de hacer el “Grupo de rescate histórico de Monte Hermoso”. Consistía en una encuesta que se presentaba a los viejos pobladores con algunas preguntas que contara vivencias que recordaran de ese Monte Hermoso del principio  cuando ellos habían llegado a este lugar. Si bien esa idea ser volcó a la comunidad, se obtuvieron algunas encuestas pero quedó allí también, como que faltaba algo. Fue pasando el tiempo y en el año 1999, la profesora que dictaba la cátedra de guía de turismo en el Centro Profesional, se le ocurrió la idea de trabajar en un “Pro Museo”  así conformamos un pequeño grupo que comienza a buscar un espacio donde reunirnos y  demostrar una idea seria, de ese modo la gente podría confiar a la hora de donar los objetos los que conformarían nuestro museo, de otro modo no se desprenderían de los mismos. Esa iniciativa no prosperó mucho que digamos y recién en el año 2005 es cuando podemos hablar de algo realmente concreto ya que se nos otorga un espacio,  que sería reacondicionado para que funcionara un museo, que en principio era donde desde el año 1951 funcionó la delegación Municipal para luego ser  Palacio Municipal a partir del año 1979 cuando Monte Hermoso se separa del partido de Coronel Dorrego y así el día cuatro de Abril del 2009 se inaugura el Museo Municipal de Monte Hermoso.
La voz de Juan es clara, firme, su  vehemente relato deja ver su pasión por la historia y por su pueblo.
-Vos hablás de un pequeño grupo de personas que se habían reunido con intención de formar un Museo Histórico,  ¿Recordás los nombres de sus integrantes?
-Si, como no, en principio estuvo la directora de la escuela secundaria Sra. Pocha Franceschini, la docente Mary Fossatti, el Dr. Maguet, Rubén Lozano, Mercedes Dumrauf, personas que en un principio estuvimos presentes pero al ver que no se concretaba se fueron alejando y así pocos quedamos hasta el final, tal es así que finalmente solo estábamos la Sra. Pocha Franceschini y yo. Lamentablemente la Sra. Franceschini falleció y quedé solo, siempre con aquella idea, ya contábamos con algunos objetos, fotografías y testimonios, pero como te decía anteriormente nos era indispensable el lugar. A partir de contar con ese espacio físico todo cambió. La gente se volcó totalmente a la donación de objetos y hoy día ya no nos queda espacio y nuestro Museo crece día a día.
Es una tarde apacible, la charla se desarrolla en las instalaciones de la radio que está sobre la playa, ésta cuenta con una gran vidriera a través de la cual  podemos ver un mar en calma, alguien que camina por la costa llevando una correa en su mano con seguridad es de ese cachorro juguetón que chapotea corriendo gaviotas, desparramando esa  espuma que las olas mansamente  van dejando sobre  la orilla.
 -Generalmente los museos, ya  cualquiera  sea su temática, cumplen una importante función en la comunidad, además teniendo en cuenta, que nuestro balneario es visitado por una importante afluencia turística, ¿Podés decir que se muestran interesados en visitarlo, vuestra expectativa es satisfecha?


-Si,  por supuesto esta temporada pasada recibimos cuatro mil quinientas persona en los meses de Enero y Febrero, el turista se interesa y quiere ver todo lo que tenemos además puedo decirte que el Museo cumple una función muy pero muy importante en la comunidad estudiantil, los chicos están con sus maestras visitándolo a diario, los directivos llaman al museo pidiéndonos los temas que desean ver y nosotros le preparamos el tema a desarrollar. Les preparamos un power point por ejemplo para comparar épocas, cómo fue la construcción en años anteriores, los medios de locomoción, cómo era la vida en el balneario antes que tuviéramos luz eléctrica, cómo se comienzan a hacer obras importantes, de ese modo empiezan trabajando  los temas que luego continúan desarrollándolos en las escuelas,  podemos decir que estos chicos que nos visitan saben mucho más de la historia de Monte Hermoso que sus papás y son ellos quienes los instruyen sobre el tema.
-¿Qué tipo de elementos tienen en el museo?
- Hay de todo. Hoy podemos decir que el museo cuenta con más de mil objetos, más de dos mil quinientas fotos, documentos que además acompañamos con la historia de los mismos, por ejemplo tal el caso del emblemático Hotel de Madera, tenemos algo de vajilla, artefactos del baño, la ruleta que funcionaba, la campana del hotel.
-¿Cómo logran contar con esos elementos teniendo en cuenta que son de tantos años  podemos decir 1920, 1930?
-Hay muchas familias que tienen cosas aún en Monte Hermoso y nosotros, oportunidad que tenemos de salir en algún medio pedimos que donen al museo los objetos antiguos que puedan tener, pues es el lugar adecuado donde deben estar, porque pasarán los años y estarán por siempre, pero si quedan en casa seguramente algún día irán a parar al basurero, ya que nietos o bisnietos pueden no saber de qué se trata y seguramente no les darán importancia.
- Es verdad seguramente no les darán el valor que históricamente tienen.
Una paloma se posa sobre la baranda del balcón de madera y allí se queda por un buen tiempo, parece escuchar atenta la interesante charla sobre su playa.
-Te cuento sobre la ruleta del Hotel de Madera que tenemos, es increíble la historia que ha tenido; la ruleta comienza a funcionar en el Hotel desde su inauguración en el año 1918, y allá por el 1925, 1926 hubo una denuncia, de que había juego clandestino  en Monte Hermoso, entonces vinieron de Lotería Nacional y se llevaron la ruleta, después de casi cincuenta años llamaron por teléfono contactando a los por entonces dueños del hotel de madera que eran los descendientes  de don Antonio Benito Costa diciendo que querían devolver la ruleta, pues algo que correspondía a la historia de este pueblo no tenía sentido que estuviera guardada en un lugar donde nadie iba a darle importancia.
-Que hermoso gesto, de alguien que entendió la importancia de tener ese elemento en nuestro pueblo que prácticamente marca el inicio del balneario.
-Así vuelve a manos de Carlos Costa y es Carlos quien se la alcanza a Vicente Di Martino,  entonces cuando el cuatro de Abril del año 2009, como te comenté, el Museo abre sus puertas,  es Vicente Di Martino quien me alcanza la ruleta y dice, “Esto pertenece a la historia del pueblo, debes tenerlo en el museo”.
-Realmente una emotiva historia, Juan cuando vos dispongas me gustaría continuar con esta charla, sumamente interesante por cierto, para hablar sobre el Hotel de Madera.
-Si con mucho gusto, del Hotel prácticamente tenemos averiguado todo, desde las primeras tablas que caen al mar hasta el fin de sus días.
-Muchas gracias por haberme  brindado tu tiempo, hasta el próximo encuentro.
El sol nos regala sus últimos rayos, debe abrirse  paso  entre esas caprichosas nubes que si o si quieren esconderlo,  pero astuto  se va filtrando entre ellas,  hasta que  nos regala el bellísimo espectáculo de ver cuando lentamente comienza a esconderse en ese mar del oeste, para luego en un instante desaparecer rápidamente,  dejando detrás  un  cielo  pincelado  de colores…  y es la más hermosa pintura, semejante  al mejor artista plástico.

1 comentario:

  1. Más allá del interesantísimo relato de Juan Sorensen.... Qué maravillosa manera de pintarnos el paisaje Silvia!

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