Marisa Orsi
ingresó en el mundo de la danza con
apenas tres años, por decisión de sus padres. Al observarla tan inquieta y
verla bailar frente al televisor, la inscribieron. Sus primeros pasos fueron de
la mano de la Profesora Ana María Viglione de Meschini, quién tenía una escuela
de danza en calle 9 de julio.
A los ocho años se pasó a otra institución,
donde se recibió a los trece años. Al casarse su profesora se va a vivir a
otra provincia, y le propone hacerse cargo de sus alumnas que quedaban a la
deriva; siempre y cuando sus padres apoyaran esta nueva iniciativa, lo que efectivamente sucedió.
El jueves pasado, alrededor de las 16, dialogó
con Periodismo en Redacción. Comentó que hace doce años que, junto a la
Escuela de Danza,
realizan la “Fiesta del Inmigrante”, la cual no existía en Punta Alta. Esto
comenzó porque la ciudad cuenta con sólo dos colectividades: la Sociedad
Española y la Sociedad Italiana, y no se podían hacer grandes fiestas.
“Gracias a este evento concurrimos a
diferentes zonas, como por ejemplo: Santa Rosa de Calamuchita, para participar
de distintas colectividades”, sostuvo.
Además manifestó que, tanto la institución
como los viajes, se sostienen gracias a las cuotas que pagan las alumnas. “Los
trajes los pagan los papás y tratan de ayudarse entre ellos”, afirmó. A esto
agregó que en algunas ocasiones recibieron ayuda por parte del Municipio; “pero
sabemos que no somos las únicas que participamos en diferentes concursos, y que
la plata de Cultura es poca y la reparten”, declaró.
Sin dejar a su público de lado, dijo: “Me
siento reconocida en la localidad y agradecida porque recibí muchos premios a
lo largo de mi trayectoria”.
A modo de reflexión expresó que “a través del
juego, el conocimiento, de lo que podemos lograr cada uno, de querernos y
aceptarnos tal cual somos…desde ese lugar, se puede despegar en el progreso de
cualquier aspecto de la danza”.
OPINIÓN
Por Florencia Martínez Romero
OPINIÓN
Por Florencia Martínez Romero
La danza necesita más sustento
En la localidad de Punta Alta hay varias
instituciones dedicadas a la enseñanza de diferentes danzas. Cada una de ellas se mantiene gracias a las
cuotas que abonan sus alumnas.
Periodismo en Redacción habló con la profesora
Marisa Orsi y dijo que a todos los eventos a los que asisten los pagan con el dinero
que obtienen de las cuotas, y también cuentan con la ayuda de los papás.
“En varias ocasiones hemos recibido ayuda por
parte del Municipio, pero sabemos que el dinero de cultura no es mucho y que lo
tienen que repartir”, comentó.
Hace un mes atrás el intendente Néstor Hugo Starc, en conferencia de prensa, señaló que a la comuna le gustaría poder ayudar económicamente un poco más a estas
instituciones; ya que están representando a nuestra ciudad, pero los costos son
muchos y el dinero no alcanza.
Sería bueno que todas las profesoras y alumnas
de las diversas danzas contaran con mayor respaldo en Punta Alta. Si bien es un
poco complicado que se puedan amparar los distintos viajes, no habría que bajar
los brazos y hacer más cosas para ayudarlas a juntar más ingresos.
Todo lo que ellas hacen es representarnos y
competir, y más de una vez ganar para sentirse orgullosas con el trabajo y el
esfuerzo de cada día y para ver cómo crece su ciudad en materia artística y cultural.
La danza es sin dudas su pasión, y sobre todo
lo que las une aún más con todos los vecinos puntaltenses, porque a la hora de
presentarse a los concursos piensan en ellos.
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