“La realidad en Bahía Blanca no escapa a lo que sucede en el país y en la provincia”

Por Lautaro Peñaflor (sede Médanos)

Entrevista a Verónica Bajo, integrante de Acciones Feministas, una de las mayores convocantes de la marcha #NiUnaMenos Bahía Blanca.

-       Sos parte de Acciones Feministas ¿Qué es tal organización?

-       Sí, yo vengo activando hace más de 10 años, desde 2003-2004, colaborando con alguna agrupación, pero formalizar con alguna organización fue en 2009, con Acciones Feministas precisamente, como agrupación para darle acción al feminismo. Yo vengo de una formación más autodidacta, por el lado intelectual de lo que tiene que ver con el género y el feminismo, y en un momento tuve la necesidad de ponerle el cuerpo en la calle, o en acciones más concretas. Ese fue el objetivo, así que a partir del 25 de noviembre de 2009, junto a otras compañeras, decidimos empezar a hacer acciones como puestas callejeras, transmisión de películas con debates, y nuestro objetivo es, más que nada, instalar grupos de reflexión.

-       ¿Tenés algún rol dentro de la organización?

-       Estamos formándonos con Personería Jurídica, pero eso es costoso. Somos autogestivas e independientes. No dependemos de ningún sindicato, ni partido político, ni mucho menos. La óptica es de un feminismo independiente y autogestivo. Por supuesto si hay mujeres que quieren colaborar, eso está abierto. Cargo no, sí por ahí soy la que llevo a adelante las actividades articulando con otras mujeres. Somos cuatro o cinco que trabajamos activamente, y después hay mujeres que para cada actividad que se vean interesadas, vienen y se suman.

-       Y en este marco, son una de las mayores convocantes de la marcha #NiUnaMenos, el 3 de Junio, ¿no?

-       Somos una de las convocantes. Uno de los objetivos que tiene acciones feministas tiene que ver con la violencia simbólica en los medios. Es decir que nuestro enfoque en los medios es constante. Reconocemos también que, con todas las falencias y sin buscarlo, los medios de Bahía Blanca se han hecho eco de Acciones Feministas, entonces nos buscan mucho, nos han tomado como referentes, y bastante de forma natural: había algún vacío de alguna actividad concreta, y con pilares determinantes como los femicidios, la violencia simbólica y mediática, la deconstrucción de la heterosexualidad obligatoria.

-       A nivel nacional, ¿quiénes convocan la marcha?

-       A nivel nacional es bastante preocupante la situación, esto de que muere una mujer cada 30 horas en condiciones aberrantes. No es que las mujeres mueren por cuestiones naturales. Mueren por machismo. Uso estas palabras porque también desde Acciones Feministas hemos hecho una campaña porque desde cómo se comunica también se hace discriminación. El lenguaje castellano es heterosexista, androcentrista y esto también lo queremos deconstruir. Corrernos de ese lenguaje, que invisibiliza a la mitad de la humanidad. El lenguaje no sólo reproduce, también construye. También es uno de nuestros ejes, construirlo. Son estrategias, porque una niña que se forma y a los cuatro años no sabe cuándo está incluida y cuándo no, psíquicamente ya está determinada.

Respecto a la convocatoria, salió aparentemente bastante espontáneamente. Algunas periodistas empezaron a tuitear, a partir del femicidio de Chiara, y con toda esta ola de femicidios que hay, con características de saña extrema. Los movimientos de mujeres sabemos qué está pasando, pero que un grupo de periodistas vuelque esto en Twitter pegó mucho. A nivel nacional, muchos se empezaron a plegar y parece que viene una movida muy grande.

-       ¿El objetivo de la jornada del 3 entonces es reflexionar sobre la situación actual, a partir de esta ola de femicidios violentos entonces?

-       Visibilizarlos. Decir “a ver, qué nos está pasando como sociedad, qué le pasa al Estado que ni siquiera es tema de agenda”. Tenemos una Presidenta que ni siquiera ha nombrado la palabra “femicidio”. Hay una Ley muy buena, pero sin presupuesto. Y uno de los ejes es la crítica a los medios de comunicación, que son misóginos, y a nosotros mismos como sociedad para pensar qué podemos hacer para deconstruir esta sociedad violenta con los niños y las mujeres.

-       Los femicidios tienen que ver con golpes, pero también se relacionan con cuestiones como trata de blancas, incinceraciones…

-       Sí, es tremendo. Pero estos delitos no son cosas extraterrestres que hace gente mala: hay un entramado cultural. El prostituyente convive con nosotros. Puede ser nuestro padre, nuestro hermano, el profesor, nuestro vecino, nuestro marido. Nos asustamos de la trata de mujeres, pero lo hombres violentos conviven con nosotros. Los famosos violentos mediáticos… tenemos un programa emblema, como lo es el de Tinelli, tenemos Duro de Domar que es de alta misoginia. Hay toda una arista de programas que todo el tiempo hacen que se construya una sociedad violenta.

-       ¿Vos creés que la cuestión de los femicidios y la violencia de género ha aumentado, o que se ha visibilizado a partir de casos muy notorios, como los de Ángeles Rawson, Wanda Tadei, Chiarla, Lola…?

-       Es una opinión personal, para mí las dos cosas. Se visibiliza más, pero han aumentado. Si me pedís la explicación, hay muchas. No sólo han aumentado la cantidad, sino también las características de saña, crueldad y odio. Los femicidios son crímenes de odio: como cuando un neonazi mata a un afrodescendiente, o como se mata a un homosexualidad. Es un varón que está formado culturalmente para creerse superior, entonces cuando la mujer lo desobedece en algún punto, la manera es quitarle la vida e incluso, quitarse la vida él. Son delincuentes producto de una sociedad.

-       ¿Notás una diferencia entre lo discursivo, que es inclusivo, y esta situación que comentamos de que los femicidios y la violencia de género están visiblemente en aumento?

-       Sí, lamentablemente ni los medios de comunicación lo toman como deberían. Hay un doble discurso, porque ni siquiera se comprende, ni hay interés. Hay un discurso lavado y vacío. Ni siquiera un político, que se asombra por un femicidio y por la inseguridad, pero después promueve una elección a reina, haciendo desfilar a una nenita de 14 años en tanga. Eso es súper peligroso: a veces no sabés si es mejor que larguen ese mensaje, o que no hablen nada. Lo mismo que lo mediático: sale Tinelli con un cartel de #NiUnaMenos y después le corta la pollerita a una mujer, tomándola como un objeto sexual.

-       ¿Es una cuestión de dividir entre hombres y mujeres? ¿Hay mujeres machistas y hombres feministas?

-       Esto de ser varón o mujeres no tiene nada que ver, es más bien una cuestión de ideología. Hay muy pocos varones feministas, y esto tal vez tiene que ver con que implica dejar sus privilegios: cuando un varón se cuestiona sus privilegios puede ser feministas. Por eso casi no encontramos varones feministas. Hay, pero muy pocos. La cultura está formada por varones machistas, pero también por mujeres machistas. Esto bien lo describe Pierre Bourdieu: la violencia simbólica, un circuito. El sector oprimido colabora, es parte en ese entramado.

-       Saliendo del plano nacional, y acercándonos a nuestra zona. ¿Cuál es la situación en Bahía Blanca y la zona?

-       No escapa a lo que es la realidad nacional y de la Provincia de Buenos Aires. En la Provincia hay 120000 llamadas al año por malos tratos, por violencia. Si hay esta cifra, imaginemos que en el país hay un millón de mujeres que sufren golpizas, y las que llaman son una cuarta parte.

-       No hay estadísticas oficiales, ¿no?

-       No hay estadísticas oficiales. Hay una Asociación Civil, La Casa del Encuentro, que sacan cifras de casos que salen a los medios. Pero hay más de los 277 que dicen. El caso de Bahía Blanca, para darte un dato (que no es exacto, porque nosotras no nos encargamos de hacer esas estadísticas, pero son relevamientos que hemos hecho de manera informal), ha habido 6 o 7 mujeres víctimas de femidicios entre Ingeniero White, Bahía Blanca y Punta Alta. Y que sepamos, no hay ninguna mujer víctima por robo por ejemplo. Pero sí del marido. Hay muchísimos casos en Bahía Blanca.

-       Sin ir más lejos, tuvimos uno de los casos resonantes a nivel nacional: Katherine Moscoso, en Monte Hermoso ¿no?

-       Exacto. Este es un tema súper delicado. Nosotras expresamos nuestra preocupación, porque que tan rápidamente se culpabilice a una chica pobre, con una vulnerabilidad en su intelecto, y que tan alegremente se hable de celos y esas cosas, cuando en Monte Hermoso hay mucho miedo y sospecha de cosas mucho más graves y complejas, que tienen que ver con prostitución de mujeres y temas más complejos. Estamos alertas y esperamos que la justicia se ejerza como tiene que ejercerse.

-       ¿Hablás del giro que dio la investigación, involucrando una trama de celos totalmente distinta a la inicial?

-       Sí, y muy rápidamente. Se ha empezado a tapar, y hay comentarios de gente amenazada. Las dos abogadas de la familia renunciaron amenazadas. Las víctimas de este sistema machista y patriarcal puede no ser sólo Katherine, sino también Daiana. En vez de una, dos.

-       Hace poco en nuestra ciudad se prohibieron cabarets, prostíbulos. ¿Cuál es tu opinión?

-       En realidad es prohibir sobre prohibir. Porque la prostitución, no el ejercicio, pero como actividad comercial está prohibido, porque estamos en un país abolicionista. Acciones Feministas se encolumna dentro de lo que es el abolicionismo: la prostitución no es un trabajo, es una forma de opresión de las mujeres, de esclavitud, que tiene que ver con la desigualdad histórica que tienen las mujeres.

-       ¿Se termina la problemática con esa prohibición?

-       No, es cultural la problemática, y también de falta de equidad de oportunidades laborales entre hombres y mujeres. Si tenemos una cultura mediática prostituyente permanente, con un aval constante con guiños hacia la prostitución, seguramente esto va a seguir siendo así. Hombres con más poder económico, que pueden disponer del cuerpo de mujeres, pobres por lo general, con un margen de libertad dudoso.

-       Decíamos que Casa del Encuentro calcula 277 femicidios, pero las víctimas son más, por lo que se llama “femicidios vinculados”, por ejemplo ¿no?

-       Sí, el femicidio vinculado es un término que desarrolló Casa del Encuentro. Son todas las personas que mueren, como niños y niñas que quedan en la línea de fuego: el varón para castigar a la esposa, le mata al niño. O que quedan en el medio de una pelea, quien esté en el medio.

-       ¿Qué puede hacer una mujer que sufre violencia de género en nuestra ciudad? ¿Dónde encuentra asistencia?

-       Lamentablemente todo lo que tiene que ver con el Estado está fallando mucho, porque no hay una decisión política de invertir en prevención, en cumplir la ley que se aprobó en 2009 y está reglamentada desde 2011. Se puede ir a denunciar a la comisaría, se puede llamar al 911, pero como está fallando tanto, lo que yo le diría a una mujer, primero, es que busque contención en personas cercanas, amigas, familiares, que lo cuente, y no queda otra que denunciar, pero siempre cuidándose y viendo no quedar a la deriva, sola.

-       ¿Cómo considerás que puede cambiar la situación que hoy vivimos, cómo empezarías?

-       Por empezar, que se cumpla la Ley de Educación Sexual en las escuelas, que las docentes y los docentes se empiecen a capacitar. Que el Estado cumpla el rol que tiene que cumplir. Y como sociedad, no ser cómplices todo el tiempo de una cultura machista: no reproducir música machista, no esterotipar a nenas y nenes de distintas maneras, empezar a educar en igualdad y con respeto. No exaltar la masculinidad con la agresividad, los juegos de ingenio y a las nenas para ser princesas.

-       ¿Algo que quieras agregar?

-       Sería importante estar el 3 de Junio en la Plaza, y no para los partidos políticos ni para usarnos, desde lo genuino. Y que cuando termine, que quien se vea interesado, que no vuelva a su casa y prenda Tinelli, por ejemplo, o le diga a su nene “no seas maricón”, o a su nena “qué linda que estás, te voy a llevar a un concurso de belleza”. Que no quede en el asombro de un femicidio. Hay que trabajar en el día a día, y también estudiar un poco, leer. Hay que empoderar a las niñas, que dispongan de su cuerpo, que sepan que cuando dicen no, es no. Hay que evitar embarazos no deseados, abusos sexuales. Hay mucha pedofilia, mucho abuso sexual a niñas y embarazos adolescentes. Esas son variables que tienen que ir cambiando. En los países más avanzados, los embarazos son después de los 30 años. Acá tenemos muchísimas chicas violadas, abusadas, sin ni siquiera poder disponer de su cuerpo como deberían. A Argentina y Latinoamérica en general nos falta mucho para llegar a estándares. En España en el anterior gobierno, los femicidios fueron tema de Estado, hasta se creó el Ministerio de la Igualdad. Tienen 80 femicidios por año. Nosotros tenemos 300, y España tiene más habitantes que Argentina.

-       Entonces, Miércoles3 de Junio, #NiUnaMenos Bahía Blanca, Plaza Rivadavia…

-       Así es. Quiero aclarar que hay muchas organizaciones convocantes, no sólo Acciones Feministas. Hay muchas adhesiones. Lamentablemente nos han eliminado por segunda vez el perfil de Facebook, por lo que el evento no existe más, hemos creado uno nuevo. A partir de las 17 horas va a haber una radio coordinadora, y a las 19 horas está pensada la movilización, alrededor de la Plaza.