Rosario Torres Carbonell
En el marco de la presentación del
grupo Kohrakhane en Punta Alta, el cónsul Italiano Pierluigi Ferraro habló con
Periodismo en Redacción para contarnos acerca del proyecto musical que lidera,
así como también la visión que encarna la propuesta cultural que lleva adelante
desde su lugar en el consulado general de Italia en Bahía Blanca.
El grupo musical Khorakhane fue
formado siguiendo el objetivo de promover la cultura italiana actual;
combinando una propuesta musical y audiovisual, presentan un repertorio del
compositor italiano Giorgio Gaber. Al respecto el cónsul e integrante del grupo
nos dijo: “El grupo es parte de nuestra estrategia, ya que estamos presentando
ahora un espectáculo de un autor que se llama Giorgio Gaber, que murió hace
siete años, contemporáneo. En Italia es un clásico. Antes hacíamos otro
espectáculo, de otro autor italiano contemporáneo… es parte de nuestra
estrategia de presentar un producto actualizado y de contenido. Nosotros
proyectamos los textos traducidos de manera que la gente lo pueda entender; de
alguna manera la música acompaña los textos. Es un espectáculo que no es
solamente música sino que también hay un actor que interpreta con unos monólogos”.
Desde el consulado, comenta Ferraro,
se está persiguiendo una estrategia para
presentar una Italia actual, siguiendo dos objetivos “el primero es presentar
la Italia de hoy en día a través de un producto actualizado; renovar la
propuesta que se venía presentando de Italia ligada a los conceptos de los 50 y
los 60 de la inmigración y la nostalgia… El segundo es un producto de calidad.
Esto ligado a que a veces en la realidad cuesta conseguir esto, y más con los
pocos recursos financieros con los que contamos.”
Por esa falta de recursos, se hizo
imperativo contar con el apoyo de fuentes de financiación externas. En este
sentido el cónsul recalcó el respaldo
que recibió de la ciudadanía bahiense, ya que “en tres años juntamos casi
150 mil euros, más de un millón de pesos y todo con empresas de Bahía lo cual es
un resultado muy bueno, y más siendo que en Bahía no operan tantas empresas… la
ciudad colaboro muchísimo con nosotros y eso que al principio hubo un poco de
problemas con la gente ya que no entendía nuestra propuesta.”
La iniciativa de revalorizar los
productos culturales actuales provino del gobierno italiano, y se traslado a
todas las dependencias Italianas del mundo; en el caso de Bahía Blanca, el
cónsul hizo referencia al cambio de visión respecto de las gestiones
anteriores: “Cuando yo llegue a Bahía me di
cuenta que estábamos actuando como
un producto viejo y de muy baja calidad. Yo trate de cambiar las cosas.
Evidentemente si uno llega a un lugar donde ya se implementó una nueva
estrategia uno solo tiene que seguir en el camino abierto. Yo diría que es un
poco una tendencia de una política cultural de parte del Gobierno Italiano de presentar la Italia de hoy día, porque
Italia sigue produciendo cultura, sigue produciendo arte, que a veces no se
conoce, no se sabe.” y sigue: “se ofrecían cosas antiguas y de muy poca
calidad, hemos pagado esta herencia. Pero siguiendo con esta política poco a
poco la gente se acostumbró y nos apoya.”
La crítica de la comunidad Italiana se
hizo sentir fuertemente, pero por parte del cónsul la mirada sobre esta
colectividad no fue menos crítica “Lo que a veces detiene este impulso es que a
las colectividades italianas esto no les gusta. Esta es una colectividad que se
quedo en el pasado, que mira hacia atrás donde no hay recambio, no hay jóvenes,
toda gente que ya tiene una cierta edad y yo creo que es muy difícil cambiar el
enfoque. Se quedaron en el pasado.”
Consciente de las resistencias que tuvieron que superar, confía en que
con el nuevo objetivo claro, se está proyectando una imagen más acabada de
Italia, y principalmente una imagen actualizada.
Pero frente a la falta de apoyo de la
comunidad local italiana, rescata una comunidad bahiense abierta a las
propuestas culturales innovadoras, y permeable al cambio: “Muchas veces nos han
criticado por gastar mucha plata en cosas que no tienen sentido. Obviamente
nosotros no estamos de acuerdo con eso. En lo que se hizo en Bahía Blanca la
comunidad (Italiana) se involucro muy poco. Es una paradoja: una comunidad
Italiana que tiene un pensamiento muy antiguo y si sigue así en veinte años se
termino todo, que no apoya o apoya muy poco; y del otro lado hay una comunidad
bahiense que apoya muchísimo.”
OPINIÓN
La falta de recursos, un tema
recurrente
Rosario Torres Carbonell
Tiempo atrás en Periodismo en redacción tuvimos la
posibilidad de dialogar con el actual intendente de la ciudad de Punta Alta
Ingeniero Néstor Hugo Starc y también con el Doctor Pierluigi Ferraro cónsul
general de Italia en Bahía Blanca. En ambos diálogos, el denominador común fue
la falta de recursos con que cuentan en su gestión para destinar a la cultura y
también la necesidad del compromiso ciudadano en el desarrollo de esta área.
En tiempos de crisis, donde escasean
los recursos económicos y áreas como la cultural retacean sus fondos, es el
momento de aguzar los sentidos para poder generar productos artísticos que sean
de bajo costo, pero sin sacrificar la calidad y el contenido de los mismos.
Muchas veces se confunde cantidad con calidad. En su dialogo con periodismo en
Redaccion, el intendente Starc se quejó de que muchas veces el municipio para
poder ofrecerle a la comunidad ciertos espectáculos de envergadura, debe correr
con gastos que luego no puede recuperar. Frente a este planteo, recogimos la
opinión del cónsul general de Italia en Bahía Blanca quien planteó la necesidad
de hacer un análisis pragmático de costo-beneficio para saber si “el costo que
afronta el municipio le aporta algo” a la comunidad.
Más aun, planteo la necesidad de
contar con metas y objetivos claros, de tener un plan de acción que impida el
mal uso de los pocos recursos con que se cuenta: “un tema fundamental es la
política cultural que un municipio tiene, yo creo que siempre un secretario
cultural, un director de cultura debe saber a dónde quiere llegar y más aún en
un tiempo donde no hay plata, no hay recursos, se tienen que fijar unas
prioridades. Por ejemplo en el consulado
nos pusimos como prioridad ofrecer únicamente productos actuales y de calidad.
Y al mismo tiempo es importante que la gente nos identifique con un proyecto
muy preciso, y para ello no se necesitan muchas ideas, pocas pero claras y
siempre con coherencia. Así la gente se acostumbra a pensar que cuando uno,
desde un municipio por ejemplo, organiza algo, ello responde a la estrategia y
ello responde también a estándares de calidad. Debe haber una visión muy clara
de lo que uno quiere llevar a la gente.”
Entonces tal vez, no se trate de
ofrecer muchos productos sino buenos productos.
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