miércoles, 21 de noviembre de 2012

Lo que dejó el 20N

Por Miguel Vital


El primer paro a la administración Kirchnerista tuvo fuerte acatamiento en la zona donde la Asociación de Trabajadores del Estado y la CTA local cortaron la ruta Nacional 3, impidiendo la circulación vehicular hacia Punta Alta y Bahía Blanca minutos después de las 9 de la mañana, siguiendo los lineamientos empleados en Capital Federal.

Ana Mendoza, principal referente de ATE Punta Alta, estuvo al frente del corte junto a demás sindicalistas que activamente se movilizaron por los sectores de la ciudad a fin de tener una realidad de la efectividad de la medida de fuerza en el distrito. Este medio estuvo en el corte, donde todo se desarrolló normalmente en lo que respecta al acatamiento y sin disturbios, aunque era visible el malestar y enojo de los viajantes detenidos a la vera de la ruta. 

Un sindicalista de segunda línea de ATE señaló que “la presidenta es ciega y sorda”, molesto por la negativa de la mandataria en recibirlos y escuchar los reclamos del sector. A su vez, aseguraron que la ruta desde Punta Alta a Bahía Blanca no se cortaría.  

Si bien los servicios de transporte público no se adhirieron a la protesta, en la administración pública, bancos y escuelas la actividad fue nula y el comercio fue atendido por sus dueños, como en el caso de una firma local de autopartes, quienes dijeron que “las cosas no se arreglan con un paro, pero para que no los haya tiene que haber diálogo. Nosotros los privados no tenemos tantos privilegios como los sectores públicos”.

El clima de confrontación y división en la sociedad es cada vez mayor. A pocos días del 8N en donde una parte de la población se manifestó en contra del Gobierno, surgió este paro general convocado por los sindicalistas opositores a las políticas de la Presidenta, quien por sus declaraciones durísimas hacia los organizadores de la movilización, a quienes tildó de “matones”, no piensa cambiar su postura. 

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