Por Yanina Scherger
El pasado fin de semana se llevó a cabo, por segundo año consecutivo, el Festival “1000
Gritos”, a cargo de Matías Sánchez. A partir de las 18.30, en el auditorio de la Biblioteca Alberdi y con gran cantidad de público, se proyectaron diversos cortometrajes.
Radicado en Buenos Aires, Matías se graduó en la Upso como Técnico Universitario en Emprendimientos Audiovisuales y fue profesor de la materia Guión y Producción de la misma carrera en dicha entidad. Como fruto de sus participaciones en distintas competencias de cortometrajes, hace dos años que despliega una variada selección de films de terror. "Los cortos salen de una encuesta en España que realiza un programador de allá y hace una selección del género y nos los envía para que los proyectemos. Después, está la muestra nacional que, de todos los cortos que nos mandan elegimos los que entrarían en la competencia y otros que, por alguna razón, no entran en ella, aunque estaría bueno proyectarlos" comentó Sánchez.
Dentro de la presentación, las categorías fueron: terror, gore (violencia explícita y exagerada), ciencia ficción y animación."Me resulta positivo que el año pasado se proyectaron 2 producciones de origen local; y ya en este ciclo son 6 o 7 cortos. Es decir, no sólo está bueno que crezca la cantidad de público que se interesa por el festival, sino también de gente que participa en él" afirmó su organizador, quien ha participado en otras competencias en lugares como Tandil (donde fue premiado) y en España, que es donde pisa más fuerte este tipo de concursos. En Argentina hay un solo festival a nivel internacional: “El Buenos Aires Rojo Sangre”, uno de los más conocidos de Latinoamérica en donde se proyectan cortos y largometrajes de terror.
-¿Qué es lo que esperas de la gente con respecto a esta apuesta que haces en Punta Alta?
-Espero traer algo distinto y que la gente se abra más. Apoyar a la cultura local aportando nuevas perspectivas, y que mi ciudad se instale dentro del circuito de este tipo de festivales. Que aquellos que filmen un corto fantástico o de terror sepan que tienen nuestro apoyo; además, de acá al año que viene esperamos recaudar fondos suficientes no sólo para volver con todos las proyecciones posibles sino que, también, poder traer profesionales que den charlas y así poder orientar a aquellos cinéfilos del terror y que, para el otro año, se puedan presentar más competidores.
-¿Y qué lograste con la primer convocatoria?
-El reconocimiento. No sólo acá, sino también en la región. Muchas personas que ni me conocían me han reconocido como “el que trajo 1000 Gritos”(risas).
El pasado fin de semana se llevó a cabo, por segundo año consecutivo, el Festival “1000
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| Matías Sánchez presentando el ciclo de "1000 Gritos" |
Radicado en Buenos Aires, Matías se graduó en la Upso como Técnico Universitario en Emprendimientos Audiovisuales y fue profesor de la materia Guión y Producción de la misma carrera en dicha entidad. Como fruto de sus participaciones en distintas competencias de cortometrajes, hace dos años que despliega una variada selección de films de terror. "Los cortos salen de una encuesta en España que realiza un programador de allá y hace una selección del género y nos los envía para que los proyectemos. Después, está la muestra nacional que, de todos los cortos que nos mandan elegimos los que entrarían en la competencia y otros que, por alguna razón, no entran en ella, aunque estaría bueno proyectarlos" comentó Sánchez.
Dentro de la presentación, las categorías fueron: terror, gore (violencia explícita y exagerada), ciencia ficción y animación."Me resulta positivo que el año pasado se proyectaron 2 producciones de origen local; y ya en este ciclo son 6 o 7 cortos. Es decir, no sólo está bueno que crezca la cantidad de público que se interesa por el festival, sino también de gente que participa en él" afirmó su organizador, quien ha participado en otras competencias en lugares como Tandil (donde fue premiado) y en España, que es donde pisa más fuerte este tipo de concursos. En Argentina hay un solo festival a nivel internacional: “El Buenos Aires Rojo Sangre”, uno de los más conocidos de Latinoamérica en donde se proyectan cortos y largometrajes de terror.
-¿Qué es lo que esperas de la gente con respecto a esta apuesta que haces en Punta Alta?
-Espero traer algo distinto y que la gente se abra más. Apoyar a la cultura local aportando nuevas perspectivas, y que mi ciudad se instale dentro del circuito de este tipo de festivales. Que aquellos que filmen un corto fantástico o de terror sepan que tienen nuestro apoyo; además, de acá al año que viene esperamos recaudar fondos suficientes no sólo para volver con todos las proyecciones posibles sino que, también, poder traer profesionales que den charlas y así poder orientar a aquellos cinéfilos del terror y que, para el otro año, se puedan presentar más competidores.
-¿Y qué lograste con la primer convocatoria?
-El reconocimiento. No sólo acá, sino también en la región. Muchas personas que ni me conocían me han reconocido como “el que trajo 1000 Gritos”(risas).
Profeta que volvió para ser reconocido en su tierra, Matías Sánchez tiene dentro de sus proyectos enriquecer y ampliar la cultura en Punta Alta y la zona, ofreciéndonos con el corazón y casi todo a pulmón; nada más y nada menos que su Ciclo de Cortometrajes “1000 gritos”.
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