La paradoja de las luces y las sombras de un ser vulnerable...

Por Susana Rubio

El Hospital Penna

Septiembre daba sus primeros pasos hacia la primavera. Todo parecía renacer alrededor del ese gigante que tantas veces sostuvo el delgado hilo entre la vida y la muerte. Los pasillos del Hospital Penna, se hacían eco de las luces y las sombras de la gente que, con paso apurado, los transitaba. 

La sala de espera de la Dirección contrastaba con su silencio formal, mientras esperaba que el Dr. Carlos Fuentes, infectólogo, Director Asociado del Penna, terminara de ordenar sus papeles, para recibirme. Juntos hemos luchado codo a codo contra otro virus famoso: VIH/SIDA.

En su oficina privada, mate por medio, el virus del ébola empezaba a mostrarse.

Folleto explicativo

PeR: ¿Qué es el ébola, en realidad?

Dr. Fuentes: Es un virus del que se conocen varios tipos, pero éste que produjo el brote, tiene una alta tasa de mortalidad, y produce la muerte muy rápido. No es que haya aparecido ahora, que no se conocía. Lo que sucede es que tiene períodos, pero esta vez ha sido altamente mortal, en países como Sierra Leona, Zaire.

El Doctor Carlos Fuentes

PeR: Se sabe que se produjo un brote en el 2013, pero que fue considerado “normal” en tiempo y espacio.

Dr. Fuentes: Se han registrado siempre algunos casos, incluso en otros países, pero no con la letalidad de éste. Lo que pasa es que hay que ver las condiciones de vida de los lugares donde aparece, que no siempre favorecen la existencia de prevención, o un cuidado minucioso cuando se contagia, o por lo general, no hay recursos para combatir la infección.

PeR: Hasta ahora la mayoría de los casos se han registrado en África, pero se habló de un caso de un sacerdote en nuestro país ¿Sigue avanzando tanto y tan rápido como dicen?

Dr. Fuentes: Con eso hay que hacer una aclaración. A veces, en el afán de dar una noticia, los medios se apresuran sin confirmarla, y en eso hay que ser muy cuidadoso. Hubo en realidad un cruce de información, porque lo que tenía ese sacerdote era una infección producida por otro mosquito, que tampoco era el dengue, pero sí del mismo género, que transmite el virus de chikungunya, bastante más agresivo. Y los casos de ébola que aparecen en otros países, siempre tiene que ver con gente que viene de la zona de infección.

PeR: ¿Este virus se transmite o se contagia?

Dr. Fuentes: El virus del ébola se transmite. Puede ser a través de la transmisión humano-animal; persona- persona, mediante el contacto directo con fluidos y/o secreciones corporales de las personas infectadas (sangre, orina, heces, saliva, semen). Éstas son las principales vías de transmisión. Lo que pasa es que también puede transmitirse por contacto indirecto con ambientes infectados, o por el solo hecho de que alguien infectado te toque, por decirlo de alguna manera. Por eso este virus tiene una tasa de mortalidad del 90%, y además no existe un tratamiento aprobado específico, ni vacuna para el uso en seres humanos o animales.

PeR: ¿Existen portadores del virus?

Dr. Fuentes: No existe el “portador del virus”. De todos modos, la manera en que el virus aparece por primera vez en un ser humano, es desconocida todavía. 

PeR: ¿Qué hay de cierto en que no se hace la autopsia al paciente que fallece debido a que el virus todavía está en actividad? Tengo entendido que, a pesar de todo, en África se sigue practicando el ritual de lavar y preparar los cadáveres familiares, directamente con las manos, velándolos varios días en su casa.

Dr. Fuentes: Por eso la epidemia es más difícil de controlar. Hay que luchar contra problemas culturales, no sólo médicos. El virus no tiene transmisión aérea, en eso es como el de la gripe, pero hay un alto índice de contagio por los fluidos de la víctima fallecida, que debe ser incinerada.

PeR: En cuanto a la transmisión animal- humano, se dice que los animales con el virus son gorilas, chimpancés, puerco espines, antílopes, murciélagos. ¿Los de nuestro país también lo tienen?

Dr. Fuentes: El animal- huésped, vivo o muerto, que son esos que nombraste y alguno más, son los autóctonos de África, aquí no se han detectado.

PeR: El que algunas personas se vean afectadas y otras no, ¿tiene que ver con la respuesta inmunológica de esa persona, con sus defensas?

Dr. Fuentes: Eso sigue estudiándose, porque como te decía, el reservorio natural del virus es desconocido. Por ahora se realizan tratamientos sintomáticos o medidas de apoyo. Se combate la fiebre, se suministra abundante líquido para evitar la deshidratación y guardar reposo. Lo que nunca se debe tomar es Aspirina, que contiene ácido acetilsalícico, por el riesgo que existe de manifestaciones hemorrágicas. Si el paciente tiene hemorragias la administración de líquidos será por vía intravenosa y se agregará concentrado de plaquetas, factores de coagulación o transfusiones de sangre si existen pérdidas importantes.

PeR: ¿Cuáles son los síntomas?

Dr. Fuentes: El período de incubación varía de 2 a 21 días, con un promedio de 8 a 10 días. En ese período no existe riego de transmisión. Los síntomas más comunes son aparición repentina de fiebre, debilidad intensa, dolor muscular, de cabeza, de garganta. Luego aparecen los vómitos, diarrea, erupción cutánea, se deterioran riñones e hígado, y en una fase avanzada, sangrados internos y externos. No siempre se puede identificar el virus en forma precoz, porque los síntomas iniciales pueden no ser específicos.

PeR: ¿Y el “rash”, qué es doctor?

Dr. Fuentes: El rash cutáneo es uno de los efectos adversos que aparecen, son como pequeñas manchitas en la piel, que se producen por el contacto con la persona infectada.

PeR: ¿Qué medidas preventivas se han adoptado?

Dr. Fuentes: Por ahora se tienen en cuenta quienes hayan tenido fiebre (mayor de 39º), contacto con algún caso confirmado de ébola en los 21 días anteriores a la aparición del síntoma, y que haya viajado a zonas donde está confirmada la existencia del virus.

PeR: ¿Y en caso de que hubiera alguno, cómo se procede?

Dr. Fuentes: Personal especializado, con equipo de protección adicional y extremando las medidas de seguridad, le tomará muestras para el diagnóstico y se enviarán al laboratorio nacional de referencia (INEI-ANLIS “Carlos G. Malbrán”)

Mientras tanto, el paciente se transfiere al hospital designado, colocándolo en aislamiento, donde haya suficientes equipos de protección (guantes, mascarillas, etc.) y personal capacitado en prevención y control de adicciones.

PeR: ¿Por qué el Hospital Penna fue designado como uno de los referentes de esta epidemia?

Dr. Fuentes: Por su proximidad al puerto, donde llegan barcos de distintos países, con tripulación que puede haber contraído el virus. Además, en todos los pisos existen habitaciones de aislamiento.

Los otros son el Hospital Eurnekian, en Ezeiza, Hospital San Juan de Dios y Ludovica, de La Plata, y Tetamanti y Alende de Mar del Plata.

Nota de la Redacción: Tanto el Penna como los restantes hospitales mencionados cuentan con condiciones para el aislamiento del enfermo, y ahora la dirección provincial de Hospitales está iniciando el proceso de capacitación del personal para protección, prevención y control de infecciones, y de compra de los elementos e insumos necesarios.

El Dr. Fuentes me entrega una copia del protocolo enviado por la Dirección de Epidemiología-Dirección Provincial de Atención Primaria de la Salud-Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires. 

El reloj de la pared, implacable, marca el mediodía. La foto de rigor, y una despedida cordial, como siempre.

La brisa agitada de la Bahía me recuerda que hay un puerto y en él, dos barcos, el Lena River y el Yenisei River, repletos de gas líquido, que, con diferencia de días, arribaron desde Nigeria. 

Los prácticos querían esperar a que se cumplieran los 21 días de cuarentena. En ese momento, comenzaron a recibir "llamados desde Buenos Aires" cedieron a cambio de concesiones. Entre ellas, que antes subieran otros especialistas. Así fue como a las 17 embarcaron un representante de la autoridad sanitaria, de Prefectura y un fumigador. Estuvieron media hora. Controlaron la declaración marítima de sanidad, el stock de medicamentos y confeccionaron una planilla con el registro de temperaturas. Ningún miembro de la tripulación tenía fiebre. (Fuente la Nueva)

Preguntado el Director del Penna, Dr. Comezaña respecto de si la enfermedad podría llegar a la ciudad, respondió que se trata de una pregunta difícil. “No es imposible; pero se trata de epidemias regionales”, dijo. (Fuente la Nueva)

La Organización Mundial de la Salud (OMS) sostiene que deben pasar 21 días para descartar todo riesgo. 

El virus del ébola, se vale para matar, como en una trágica paradoja, de lo mismo que da vida: sangre y semen. Se desliza silencioso, decidiendo caprichosamente el destino de un ser, tan vulnerable y soberbio al mismo tiempo, por su calidad de humano.