Partido cambiante, goles por doquier y gargantas que seguro quedaron saturadas después de este apasionante duelo
Por Agustín Ferrara
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| El arquero de Olimpo,Pastor ejecuta un tiro libre tras un offside
Foto: Mundo Aurinegro
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Sábado. Con una previa movida y con la hermosa novedad con respecto al torneo pasado de ver las tribunas visitantes con público, la fecha 3 de la Liga del Sur contenía en su programación un clásico: el “chivo” recibía en el Doctor Alejandro Pérez al “aurinegro”. Ambos llegaban invicto, Liniers con dos empates y Olimpo con sendas victorias que lo ubicaban con puntaje ideal, el margen de hinchas de ambas parcialidades denotaba el momento de los equipos y lo que se jugaba en un terreno de juego que lucía en espectaculares condiciones.
Arrancado el partido pasadas las 16 se podía sentir que iba a ser un duelo con muchas emociones pero superó expectativas, incluso las del más exagerado, debido a que en solo 3 minutos el local llegó al gol por medio de Perotti, aunque no duraría mucho la ventaja porque a los 17 Pierce ponía la igualdad y tan solo dos minutos después el joven González daba vuelta al marcador como un knock-out que parecía duró de asimilar para el “albinegro”, pero con las constantes órdenes del técnico Walter Carrio el 2-2 llegó por obra del delantero Baranovsky. Cerca del final de los primeros 45 minutos González volvería a aprovechar las dudas del fondo de Liniers para enmarcar su doblete y el 3-2 en el resultado.
Pintaba mejor para Olimpo y más cuando en la segunda etapa la visita colocaría el 4-2 nuevamente definido por Pierce, luego a los 26 sería el defensor Ullmann quién conecte un córner al gol y nomás dos minutos más tarde Osinaga sería quién marcará el 5-3 que hacia mirar para un arco y luego para el otro, sin mediocampo y con el partido roto era cuestión de ver quién definía las chances de gol que las defensas rivales dejaban a merced de los ofensivos, y aquí es cuándo entrará a jugar la figura del partido, y la pesadilla del autor del quinto gol “aurinegro”, Lautaro Ceratto, quién propinó tres goles para llevarse la pelota, a los 33’, 37’ y 48’, dando así vuelta la historia de un partido cambiante con un resultado final de 6-5, ¿fue un partido de tenis? No, fue de fútbol y salió triunfante el “chivo” que llegó a los cinco puntos en el torneo.
¿Lo negativo? La muy mala reacción de quién debería de dar el ejemplo, el presidente de Liniers festejando contra un grupo de Olimpo donde ocurrieron algunos cruces que por suerte no empañaron la fiesta del deporte. ¿Lo positivo? Quién si dio el buen ejemplo fue el defensor de Olimpo, Agustín Osinaga quién felicitó a Ceratto por su labor y por los goles hechos, una muestra de que solo son rivales y no enemigos. Él dio su testimonio finalizado una vez el encuentro y dijo lo siguiente:
-Veníamos trabajando mucho la pelota parada, y hoy por esa vía nos lastimaron constantemente. Tenemos que tener un poco más de concentración en las marcas.
-¿Venían con la idea de sumar?
La idea era seguir el mismo camino que en las fechas pasadas, creo que se perdió un partido clave
-Hoy parecen un equipo más trabajado ¿a qué se debe?
El año pasado los jugadores alternaban primera y liga, no se encontraba de esa forma la regularidad que hoy con un grupo ya formado tenemos
-En lo personal y colectivo ¿cómo se sintieron y cómo se ven de acá al final?
Personalmente, grite mucho el gol y fue lindo, lo venía buscando hace mucho. En lo colectivo estamos con mucha fe y esperanza. El grupo está muy comprometido y lo demuestra cada semana, cada entrenamiento, salimos a la cancha decididos a buscar el triunfo
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