lunes, 5 de noviembre de 2018

Trenes, mate e historia.


Alejandro Silva
Los ferrocarriles de Alejandra de Falco, pasión por el metal.
Este sábado por la tarde se realizó la “Gran Mateada en la Estación Solier”, evento que congregó a un público variado de la ciudad. El cual disfrutó de una tarde de recuerdos y anécdotas. El encuentro se realizó en la ex estación Almirante Solier, la cual hoy en día funciona como sede de actividades culturales. La mateada fue organizada por la Secretaría de Cultura de Coronel Rosales, la Cooperativa Ferroviaria (FERROCOOPA) de Punta Alta, el Círculo Literario Punta Alta y el grupo Poetas de la Bahía. Cabe destacar la presencia de ex trabajadores del ramal ferroviario de Punta Alta así como familiares de ex maquinistas ferroviarios.
Alejandra de Falco, miembro del Museo Ferroviario de Haedo “Scalabrini Ortiz”, presentó una serie de dibujos propios hechos con tinta. En ellos, intenta reflejar la magnitud y mística de lo que haya le apasiona y le parece imponente: las grandes locomotoras, los “cuerpos de hierro y acero”, y las diferentes perspectivas de las estaciones que ella ha visitado. Consultada por su forma de trabajar y la búsqueda de inspiración, Alejandra declaró: “Considero mucho más importante trabajar en el entorno, donde puedo escuchar los sonidos del metal, los olores del aceite, combustible, etc. Mi mayor meta es lograr, mediante mis dibujos, que cada vez se preste más atención a nuestro patrimonio nacional y restaurarlo, para poner contar con el ferrocarril en pleno funcionamiento. La inspiración viene de los sentidos, los olores, los sonidos; pero también de esa cierta mística que poseen las máquinas, porque nos cuentan historias y poseen un pasado imponente”.
Por parte de Ferrocoopa su presidente Eduardo Cano, un apasionado por lo ferroviario, nos contó acerca de las intenciones e ideales de su cooperativa: “Nuestra principal preocupación es la reactivación del ramal ferroviario Rosario – Punta Alta. Esto generaría amplios puestos de trabajo, la reactivación de la economía de muchos pueblos que desaparecieron junto con los trenes y empezar de a poco a recuperar nuestras vías, ya que tenemos la octava red ferroviaria más grande del mundo, pero sólo está operativa un 5% de ésta”. Ferrocoopa trabaja con otras agrupaciones, las cuales van de ciudad en ciudad, informándose de la situación de las diferentes estaciones del país.
Desde la Fundación Malvinas Argentinas, una de las organizaciones que colabora con Ferrocoopa, nos contaron acerca de la travesía del velero “Galileo”, el cual fue la última embarcación en flamear una bandera argentina en las islas. Este velero se dirigirá al Faro del Fin del Mundo, en Ushuaia, para inaugurar una biblioteca. Reciben donaciones literarias de temática variada, pero por sobre todo de temática patagónica y sobre las Islas Malvinas.
Por último Oscar Urrutia, escritor puntaltense, nos habló acerca de su nuevo libro “Historia de las Historias del Ferrocarril”, el cual recopila historias propias del escritor como también relatos de terceros, todos relacionados con el ferrocarril. Familiar de ferroviarios y trabajador del ramal de Buenos Aires, Urrutia pertenece al grupo “Poetas de la Bahía”. Esta agrupación alienta a las personas de la región a contar sus propias historias mediante la escritura y la narración.
La estación Almirante Solier seguirá albergando eventos de ésta índole, ya que en palabras de sus organizadores “La forma de preservar la historia del ferrocarril es manteniendo vivos sus recuerdos, así como luchar por que algún día vuelva a recorrer nuestro país".

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